Biodiversidad Fúngica

OLOR

Sin duda es uno de los caracteres organolépticos más subjetivos, tanto por la agudeza personal como por la identificación y denominación particular de cada olor.

Debe procurarse percibir el olor en fresco, al poco de recoger el ejemplar, pero a veces conviene repetir la prueba pasadas unas horas. No ha de haber otras fuentes de olores cercanas (hongos muy olorosos, cebollas, pescado, etc.).

Se distinguen diversos olores:

  • Nulo: Amanita rubescens, Amanita caesarea.
  • Harinoso: Calocybe gambosa, Clitopilus prunulus, Clitocybe.
  • Aliáceo: Marasmius aliaceus, M. scorodinus.
  • Anisado: Clitocybe odora, Agaricus arvensis, A. sylvicola.
  • Putrefacto: Phallus impudicus, Boletus satanas.
  • Desagradable, no putrefacto: Sarcodon imbricatum.
  • A rábano: Hebeloma.
  • A cloro: Mycena alcalina.
  • A patata: Amanita spissa, A. citrina.
  • Acido, fúngico desagradable: Paxillus involutus., Boletus calopus.
  • Fúngico agradable: Boletus edulis.
  • Afrutado: Cantharellus cibarius, Lepista nuda.
  • Amargo: Boletus radicans.
  • A yodo, tinta o fenol: Boletus impolitus, A. xanthoderma.